La patología que se desarrolla en el territorio del área de conocimiento de la otorrinolaringología (ORL) puede beneficiarse de la utilizazión de una terapéutica farmacológica tópica. Ello es debido, en gran medida, a la buena accesibilidad de las cavidades de la ORL a este tipo de terapia médica ya sea de forma directa o mediante el uso de técnicas sencillas mediante la ayuda de un instrumental de fácil manejo. El objetivo del tratamiento tópico es doble: tratar la patología, aguda o crónica, y normalizar la fisiología del órgano afectado.
Como cualquier otra forma de administración, la medicación tópica puede desarrollar reacciones adversas principalmente por dos causas: una absorción inapropiada o excesiva y por hipersensibilidad. Estas reacciones adversas pueden aparecer a nivel local o sistémico, manifestándose respectivamente en forma de irritación, eccema de contacto, o edema de glotis, broncospasmo, toxicidad y otros efectos secundarios. Va a ser pues del todo imprescindible, a la hora de la prescripción, tener en cuenta las siguientes variables: la adecuación del tratamiento, las características del órgano diana, las características del paciente, la forma de presentación y de administración del fármaco