No resulta fácil predecir cuándo ni de qué naturaleza será la próxima pandemia.

La presentación de una epidemia depende de muchas circunstancias, algunas de las cuales difíciles de identificar.

Es de suma importancia una buena cooperación entre la Salud Pública y la clínica. Salud Pública cuya versión local seria la Salud Comunitaria.

El impacto de las epidemias puede atribuirse directamente a la patología e indirectamente a los efectos adversos de las medidas adoptadas para su prevención y control.

Es necesario asumir –de verdad– la incertidumbre y gestionarla razonable y sensatamente; la serenidad es un instrumento imprescindible en estas ocasiones.

Es imperativo evaluar los efectos de una epidemia y, en su caso, modificar las medidas adoptadas para su control.