La ecografía es una técnica válida, fiable y más sensible que la exploración clínica en el estudio de la patología musculoesquelética.

La estandarización y sistematización de la exploración ecográfica ha sido la base para demostrar su validez, fiabilidad, reproducibilidad y factibilidad en múltiples enfermedades reumáticas.

Es una técnica inocua, económica, bien aceptada por el paciente y que permite en tiempo real una exploración multiplanar y dinámica.

Las principales limitaciones son la ventana acústica, la cortical ósea y que es una técnica altamente dependiente del operador.

Ayuda a establecer un diagnóstico preciso, valorar el grado de inflamación y de lesión estructural y monitorizar la respuesta al tratamiento de las enfermedades inflamatorias. Tiene un impacto directo sobre las decisiones terapéuticas.

Se emplea para guiar infiltraciones locales articulares o periarticulares consiguiendo una mayor precisión y efectividad, provocando menor dolor y reduciendo la iatrogenia.