- •
La enfermedad inflamatoria pélvica es una patología infratratada e infradiagnosticada, que engloba patología infecciosa del tracto genital inferior femenino, con repercusión negativa en la esfera sexual y reproductiva de la mujer
- •
Su diagnóstico sigue siendo fundamentalmente clínico a día de hoy, a pesar de tener a nuestro alcance pruebas complementarias que ayudan a un diagnóstico más específico.
- •
Una clínica compatible: mujer sexualmente activa, con dolor pélvico sin otra causa justificable y tacto bimanual doloroso, será suficiente para iniciar tratamiento empírico con antibioterapia incluso desde el especialista de atención primaria.
- •
Las pruebas complementarias ayudan a aumentar la especifidad del diagnóstico, así como establecer qué pacientes son candidatas a ingreso hospitalario: analítica, pruebas de imagen, toma de muestras microbiológicas.
- •
En casos de duda acerca de si es necesario el ingreso hospitalario (paciente inestable, mala respuesta al tratamiento ambulatorio), pacientes gestantes o postmenopáusicas, se derivará tras la sospecha clínica a Ginecología y Obstetricia para valoración.
- •
Es fundamental en el manejo la información a la paciente así como la importancia de un seguimiento posterior hasta una resolución completa del cuadro para minimizar efectos negativos a medio y largo plazo.
Palabras clave
Identifíquese
¿Aún no es suscriptor de la revista?
Comprar el acceso al artículo
Comprando el artículo el pdf del mismo podrá ser descargado
Teléfono para incidencias
De lunes a viernes de 9h a 18h (GMT+1) excepto los meses de julio y agosto que será de 9 a 15h